El cambio de modelo que estamos viviendo hacia servicios centrados en la persona e inclusivos en la comunidad requiere, para su implementación real, de la apuesta por una gestión efectiva, eficiente y sostenible. Por otro lado, la situación actual socio-económica está conllevando dificultades importantes a algunas entidades del tercer sector. En esta línea, desde la Federación se detecta la necesidad de apoyar en la gestión a entidades que se encuentran en una situación de “crisis” grave desde el punto de vista organizacional y económico, haciéndolo desde una perspectiva individualizada, desde una planificación centrada en la entidad, que permita analizar su situación particular y proponer medidas y apoyos adaptados a cada entidad, contribuyendo a su sostenibilidad presente y futura.
Este planteamiento de apoyo, además, incluye un abordaje de la globalidad de la organización, desde una perspectiva de crecimiento, de innovación y de transformación de servicios hacia servicios centrados en la persona (es decir, con una apuesta no sólo por una contención del gasto, sino por un crecimiento hacia la transformación organizacional y la innovación de la entidad).
Para ello, se sigue un procedimiento sistematizado que parte de la identificación de la entidad “en crisis”, su adhesión formal, el establecimiento de un equipo de apoyo en la gestión, la realización de un diagnóstico de la situación, el establecimiento de un plan de acción, su implementación, seguimiento y evaluación.
En este proceso es clave, además de la implicación de la propia entidad “en crisis”, la participación de entidades federadas “expertas por experiencia” que, junto con la Federación, conforman el equipo de apoyo a la gestión que desarrolla el proceso.
Con este proceso, se fomenta el trabajo en red, el co-liderazgo, la interlocución y relación con la administración, así como el posicionamiento de la Federación. Además, es una práctica alineada claramente con los planteamientos ideológicos y normativos actuales, con el modelo de atención centrada en la persona, con el Plan estratégico federativo Horizonte 24 y su sistema de gestión (Sello EFQM 300+) –desde el que se hace especial foco en un proceso de planificación centrado en la entidad-, así como con la ponencia estratégica de Plena inclusión Ganamos en comunidad; por último, además, contribuye al desarrollo sostenible, no sólo de las entidades, sino del planeta.