En febrero de 2019 comienza una experiencia piloto en el Colegio Sagrada Familia de Almería. Cuatro deportistas con discapacidad intelectual, Ana, Javi, Álvaro y César, asisten de forma voluntaria cada miércoles a las clases de Educación Física de los alumnos de 1º y 2º de Primaria.
Estas cuatro personas, han mostrado en numerosas ocasiones su disposición a ejercer roles de contribución en la comunidad de forma altruista y solidaria, con el apoyo de la asociación. Ana ha ejercido de azafata, especialista en accesibilidad y presentadora de eventos; Álvaro acude a la emisora de Cadena Ser cada semana como locutor opinando –en directo- sobre cine, su gran pasión; Javi es directivo en nuestra entidad actualmente y al igual que César, ha sido voluntario en varios eventos comunitarios (Carreras, Jornadas, Torneos Deportivos, etc); y ambos son grandes aficionados al deporte.
Su rol en las clases consiste en:
- Facilitar que los alumnos vayan adquiriendo la técnica de cada deporte, ejerciendo de modelos o dando correcciones técnicas.
- Ayudar al profesor con el desarrollo de las clases (reglas de los ejercicios, silencio cuando se explica, montar-recoger material deportivo, etc...)
- Dinamizar y animar a los niños participando en algunos ejercicios.
Esta posibilidad surgió tras una actividad de sensibilización que nos solicitó este mismo Colegio. Después de organizar una sesión deportiva, tanto alumnos como personas con discapacidad demandaron repetir esto semana tras semana. Esto nos hizo reflexionar a nosotros como entidad, ya que nos dimos cuenta de que cuando la persona con discapacidad es la que muestra sus capacidades ofreciendo o aportando algo a otros, se crean oportunidades de participación y el impacto en inclusión es mucho mayor
La filosofía que fundamenta esta práctica tiene que ver fundamentalmente con los roles de contribución, la conducta pro-social y el ejercicio de roles de ciudadanía dignos y valiosos. De forma más práctica, estas cuatros personas con discapacidad se aprovechan de las competencias y del dominio que han ido adquiriendo en sus contextos de ocio, principalmente deportivos, para prestar apoyos a otros, en este caso alumnos de 6 y 7 años, trasladando su pasión por el deporte.
El apoyo desde A Toda Vela, además de mediar en el convenio de colaboración con el Colegio SaFa, consiste en asesorar a estas cuatro personas en el desempeño de su acción voluntaria. Estos apoyos proceden tanto del Servicio de Ocio como del Servicio de Empleo. Es decir, un técnico de la entidad se encarga de asistir con ellos a las clases para facilitar que vayan adquiriendo nuevas habilidades, como pueden ser, entre otras, el manejo de grandes grupos de alumnos o distintas habilidades de comunicación (captar la atención de los niños y dar instrucciones para los ejercicios, entre otros).